De Zócalo Saltillo
Campos Elíseos
Katia D'ArtiguesAMLO en las alturas
Y el sapo del “voto útil” brincó ya. Ayer Manuel Espino, ex presidente del PAN en tiempos de Fox, enfrentado hasta la expulsión con el actual presidente Felipe Calderón y su equipo, llamó a votar por Enrique Peña Nieto, candidato del PRI.
“No estamos adhiriéndonos al PRI, sino sumando por el proyecto de Enrique Peña Nieto”, dijo ayer Espino en un argumento que me recordó la canción “Let’s call the whole thing off”. Es que dice en el coro: Potato, potatoe. Se dice diferente, se refiere a la misma cosa: Aceptar que la candidata del PAN no tiene posibilidad alguna de ganar. Como lo dijo Vicente Fox, cercano a Espino.
Espino, en el 2008, escribió un libro llamado “Señal de alerta”, en el que alertaba a Calderón sobre cómo su gobierno estaba siendo secuestrado por el PRI… en particular por Manlio Fabio Beltrones, medio paisano suyo.
Tras de eso lo corrieron, él apeló la decisión ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Trife, quien ratificó su salida del PAN. Inició un movimiento llamado “Volver a empezar”, que busca “refundar” (con a, con a) el PAN.
Estoy muy confundida ideológicamente.
Espino, un hombre a todas luces conservador, asegura que su apuesta es razonada y que no es traidor a los principios del PAN. Al contrario, dice que la campaña de Peña Nieto es lo más cercano al PAN. Y bueno, tendría sentido con una declaración reciente del mismo EPN a “The Washington Post”:
—Si ves las propuestas de los tres principales candidatos— hay una gran diferencia con el candidato de la izquierda, del PRD. Quizás el PAN es más similar a nosotros; la diferencia es quién es capaz de hacer que estas cosas sucedan.
Mmm. Por otro lado, Manuel Bartlett, quien era más bien de la escuela presidencial priísta tradicional… ¡está con López Obrador y es candidato del Movimiento Progresista en Puebla! Y Bartlett dice que él no se movió, sino que fue el PRI quien se volvió… de derecha. ¿O sea que el PRD en realidad es el viejo PRI, de centro-izquierda?
A estas alturas se podrá hablar de la conjugación de tres verbos: Declinar, inclinar y reclinar. Mientras Peña, aún puntero, se inclina en las encuestas; a Josefina la presionan -como bien adelantaba el editorial de Germán Martínez, de un grupo muy contrario al Espino, por cierto- a declinar; mientras AMLO… se reclina en el voto joven.
No cabe duda de que en tiempos de campaña todo se vale. Ayer le tocó el turno a Andrés Manuel López Obrador, quien viajó a Reynosa, Tamaulipas a un acto de campaña.
Desde la ciudad de México abordó el vuelo 2596 de Aeroméxico y se sentó en la fila 6-C. En ese mismo vuelo viajaba Rubén Núñez, contratista de Pemex.
Habrán sido los 36 mil pies de altura, o vaya usted a saber qué fue, pero el caso es que el pasajero pidió al resto de las personas que viajaba con él que le echaran porras a AMLO, y lo hicieron.
Luego, pidieron al candidato presidencial que les dijera unas palabras, una especie de mini mitin, a lo cual finalmente accedió el candidato.
Les faltó tiempo, tuvieron que dar por terminado el acto debido a que debían preparar el aterrizaje. No cabe duda de que AMLOve está en las alturas.
Cuando los medios son noticia. Sé de muy buena fuente que PRI, PAN, y PRD-PT-MC se han puesto de acuerdo en los últimos días. Cruzaron llamadas y decidieron hacer un frente común.
Y es que Joaquín López Dóriga, para su programa de radio, los invitó a una mesa de coordinadores, igual que la de Carmen Aristegui, pero los viernes. Pese a que en principio se negaron y querían mandar a los voceros -cosa que provocó el reclamo del periodista- todos aceptaron. No entiendo a qué horas coordinan con tanta mesa, pero bueno.
Dado que son los únicos que debaten, platican, se saludan por Twitter, bromean y hasta se ponen de acuerdo en los temas a tratar. ¿Y si los sustituimos por los candidatos presidenciales?
Lo malo es que en cuanto Josefina, AMLO y EPN llegaran a la mesa y acordaran, debatieran…. Los actuales coordinadores ya no lo harían por estar en su papel. Sólo que se vuelvan swingers políticos.
Lo cierto es que los jóvenes están moviendo la agenda en esta elección. Sí, ese grupo poblacional que son la tercera parte de los mexicanos que podrán votar el 1 de julio. Un grupo que muchos consideraban como “apático” y “desilusionado de la política” está demostrando que no es así. Hoy preparan una marcha. Los detalles se los doy en la edición online de esta columna, además de la propuesta priísta para moderador en el segundo debate, las patadas a Miguel Ángel Macera y #porestosnostocovotar.
“No estamos adhiriéndonos al PRI, sino sumando por el proyecto de Enrique Peña Nieto”, dijo ayer Espino en un argumento que me recordó la canción “Let’s call the whole thing off”. Es que dice en el coro: Potato, potatoe. Se dice diferente, se refiere a la misma cosa: Aceptar que la candidata del PAN no tiene posibilidad alguna de ganar. Como lo dijo Vicente Fox, cercano a Espino.
Espino, en el 2008, escribió un libro llamado “Señal de alerta”, en el que alertaba a Calderón sobre cómo su gobierno estaba siendo secuestrado por el PRI… en particular por Manlio Fabio Beltrones, medio paisano suyo.
Tras de eso lo corrieron, él apeló la decisión ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Trife, quien ratificó su salida del PAN. Inició un movimiento llamado “Volver a empezar”, que busca “refundar” (con a, con a) el PAN.
Estoy muy confundida ideológicamente.
Espino, un hombre a todas luces conservador, asegura que su apuesta es razonada y que no es traidor a los principios del PAN. Al contrario, dice que la campaña de Peña Nieto es lo más cercano al PAN. Y bueno, tendría sentido con una declaración reciente del mismo EPN a “The Washington Post”:
—Si ves las propuestas de los tres principales candidatos— hay una gran diferencia con el candidato de la izquierda, del PRD. Quizás el PAN es más similar a nosotros; la diferencia es quién es capaz de hacer que estas cosas sucedan.
Mmm. Por otro lado, Manuel Bartlett, quien era más bien de la escuela presidencial priísta tradicional… ¡está con López Obrador y es candidato del Movimiento Progresista en Puebla! Y Bartlett dice que él no se movió, sino que fue el PRI quien se volvió… de derecha. ¿O sea que el PRD en realidad es el viejo PRI, de centro-izquierda?
A estas alturas se podrá hablar de la conjugación de tres verbos: Declinar, inclinar y reclinar. Mientras Peña, aún puntero, se inclina en las encuestas; a Josefina la presionan -como bien adelantaba el editorial de Germán Martínez, de un grupo muy contrario al Espino, por cierto- a declinar; mientras AMLO… se reclina en el voto joven.
No cabe duda de que en tiempos de campaña todo se vale. Ayer le tocó el turno a Andrés Manuel López Obrador, quien viajó a Reynosa, Tamaulipas a un acto de campaña.
Desde la ciudad de México abordó el vuelo 2596 de Aeroméxico y se sentó en la fila 6-C. En ese mismo vuelo viajaba Rubén Núñez, contratista de Pemex.
Habrán sido los 36 mil pies de altura, o vaya usted a saber qué fue, pero el caso es que el pasajero pidió al resto de las personas que viajaba con él que le echaran porras a AMLO, y lo hicieron.
Luego, pidieron al candidato presidencial que les dijera unas palabras, una especie de mini mitin, a lo cual finalmente accedió el candidato.
Les faltó tiempo, tuvieron que dar por terminado el acto debido a que debían preparar el aterrizaje. No cabe duda de que AMLOve está en las alturas.
Cuando los medios son noticia. Sé de muy buena fuente que PRI, PAN, y PRD-PT-MC se han puesto de acuerdo en los últimos días. Cruzaron llamadas y decidieron hacer un frente común.
Y es que Joaquín López Dóriga, para su programa de radio, los invitó a una mesa de coordinadores, igual que la de Carmen Aristegui, pero los viernes. Pese a que en principio se negaron y querían mandar a los voceros -cosa que provocó el reclamo del periodista- todos aceptaron. No entiendo a qué horas coordinan con tanta mesa, pero bueno.
Dado que son los únicos que debaten, platican, se saludan por Twitter, bromean y hasta se ponen de acuerdo en los temas a tratar. ¿Y si los sustituimos por los candidatos presidenciales?
Lo malo es que en cuanto Josefina, AMLO y EPN llegaran a la mesa y acordaran, debatieran…. Los actuales coordinadores ya no lo harían por estar en su papel. Sólo que se vuelvan swingers políticos.
Lo cierto es que los jóvenes están moviendo la agenda en esta elección. Sí, ese grupo poblacional que son la tercera parte de los mexicanos que podrán votar el 1 de julio. Un grupo que muchos consideraban como “apático” y “desilusionado de la política” está demostrando que no es así. Hoy preparan una marcha. Los detalles se los doy en la edición online de esta columna, además de la propuesta priísta para moderador en el segundo debate, las patadas a Miguel Ángel Macera y #porestosnostocovotar.
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