De El Economista
Redacción El Economista
nueva demanda en nueva york
El 30 de marzo dos fondos se unieron a la querella que acusa que bancos manipularon precios de papeles del gobierno mexicano.

Una demanda colectiva presentada en Nueva York relativa a
operaciones con bonos del gobierno mexicano mencionó a HSBC, Credit
Suisse, Barclays y Deutsche Bank como acusados, reportó el lunes IFR.
Dos
fondos de pensiones de Estados Unidos, Oklahoma Firefighters Pension
and Retirement System y Electrical Workers Pension Fund Local,
presentaron el 30 de marzo la demanda, que acusa que los bancos se
coludieron para manipular los precios de los bonos emitidos por el
gobierno de México.
La querella de los fondos se deriva de la
pesquisa que la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece)
anunció en abril del 2017 sobre el asunto. Los fondos alegan que
pagaron de más como resultado del esquema de precios de los bancos.
“Esas
acciones alegan en general que los acusados conspiraron para arreglar
los precios de los bonos del gobierno mexicano entre enero del 2006 y
abril del 2007 en violación de leyes federales antimonopolio”, indicó
HSBC en la presentación de sus resultados del primer semestre.
Por
su parte, Credit Suisse refirió la semana pasada que había sido
mencionado en varias demandas colectivas en Estados Unidos que “acusan
una conspiración entre Credit Suisse y otros bancos para manipular el
mercado de bonos del gobierno mexicano”, reportó IFR. La acción fue
confirmada también por Barclays y Deutsche. Este último señaló que el
caso estaba en etapas iniciales.
¿Qué pasó?
En abril del 2017, los intermediarios financieros (bancos, casas de
Bolsa y sociedades de inversión) eran investigados por la Cofece por
posibles prácticas monopólicas absolutas en el mercado de la
intermediación de valores de deuda emitidos principalmente por el
gobierno federal, estatal y municipal.
Hace un año la Cofece, a
través de la investigación de oficio IO-006-2016, investigaba a los
intermediarios financieros con alguna participación en subastas en los
últimos 10 años partiendo desde octubre del 2016 (a abril del 2017) para
ver si han manipulado el precio de estos valores, las tasas de interés o
si han tenido algún tipo de intercambio de información para manipular
la demanda sobre estos valores.
Según funcionarios de la Cofece,
si al final la investigación determina que hubo colusión para manipular
el precio de estos valores o las tasas de interés, implicaría una
afectación al erario público. En caso de comprobar estas prácticas,
perjudicará al erario público porque el gobierno debe pagar más por la
deuda que está contrayendo, que son miles de millones de pesos y que
pudo evitar si hubiera más competencia.
Difícil, pensar en manipulación
El sistema de asignaciones de subastas de valores del gobierno que
lleva a cabo el Banco de México (Banxico) para otorgar títulos del
gobierno federal a los intermediarios financieros, difícilmente se
prestaría para prácticas monopólicas, aseguraron analistas de Signum
Research.
Explicaron que Banxico realiza las asignaciones de manera transparente entre los participantes del mercado.
Comentaron
que la investigación que está haciendo la Cofece sobre las prácticas
monopólicas en el mercado de intermediación de valores de deuda emitidos
por el gobierno federal difícilmente arrojará un culpable, sobre todo
entre los 10 bancos más grandes del sistema bancario.
Los
analistas destacaron que la Secretaria de Hacienda y el Banco de México
han autorizado a bancos para fomentar la competencia dentro de la
asignación de títulos gubernamentales.
El Banxico asigna los
títulos gubernamentales al mejor postor, y por su puesto a los intereses
del gobierno federal, es decir, los valores del gobierno son asignados a
la menor tasa posible, además de ser competitiva en el mercado,
destacaron.
Explicaron que cuando Banxico realiza la subasta de
valores semanalmente, normalmente las asigna entre los 10 bancos más
grandes del sistema bancario, y a eso no se le puede llamar “prácticas
monopólicas”.
Tercer periodo
La indagatoria que efectúa la Cofece en el mercado de bonos de deuda
del gobierno mexicano se encuentra en el tercer periodo de ampliación
que marca la ley. Este lapso inició el pasado 1 de junio, por lo que a
la fecha han transcurrido 47 días de los 120 días hábiles que conforman
el periodo de investigación ampliado.
El órgano antimonopolios
goza, por ley, de 120 días hábiles para investigar, más hasta cuatro
ampliaciones, también de 120 días hábiles, de modo que dispone de hasta
600 días hábiles, que se traducen en alrededor de dos años y medio
naturales de indagatoria.
En caso de que la Cofece empleara al
máximo lo que la ley le permite, la segunda quincena de noviembre podría
solicitar una ampliación más, que, de agotarse también en su totalidad,
llevaría el término de la investigación hacia mayo del 2019.
El
proceso legal del órgano que preside Alejandra Palacios dio inicio
formal el 28 de octubre del 2016, pero fue notificado a la opinión
pública hasta el 19 de abril del 2017.
A finales de mayo pasado,
trascendió que los agentes económicos que estarían bajo investigación,
Santander, BBVA Bancomer, JPMorgan Chase, HSBC, Barclays, Citibanamex,
Bank of America-Merrill Lynch, Credit Suisse y Deutsche Bank, estaban
presionando para que se concluyera la investigación antes de que
iniciara el próximo sexenio, lo cual fue desmentido por Alejandra
Palacios. (Con información de Reuters, Ricardo Jiménez, Octavio Amador y
Elizabeth Albarrán)
No hay comentarios:
Publicar un comentario