De El Universal
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El presidente Andrés Manuel López Obrador y el titular de la
Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de
Hoyos, chocaron tras la aprobación de la ley para combatir la venta y
compra de facturas falsas y equiparar el ilícito como delincuencia
organizada.
En la conferencia de prensa mañanera, el mandatario criticó que Coparmex
se oponga a la reforma y acusó que con sus acciones parece estar de
acuerdo con las operaciones simuladas y que actúan como un partido
político opositor.
En Palacio Nacional, aseguró que no existe una persecución contra los
empresarios, pero comentó que “el que nada debe nada teme”.
“Me llama muchísimo la atención. ¿Cómo una organización empresarial va a
estar en desacuerdo?, ¿cómo se va a estar apoyando la falsificación de
facturas? Lo que están demostrando es que estaban de acuerdo con estos
ilícitos (…) El caso de la Coparmex lo veo como si fuese un partido
político opositor, con fines políticos, como oposición, pero estos temas
no los deberían avalar.
“¿En dónde queda la honestidad y la decencia del conservadurismo?, ¿no
que eran gente de bien? Me dejó anonadado este asunto. El que nada debe
nada teme. En la ley se puede decir que es delito grave el falsificar
facturas, el crear empresas fantasma para evadir impuestos; pero si
ellos no falsifican facturas, si no constituyen empresas fantasmas, ¿qué
les va a preocupar?”.
Indicó que si los empresarios se quieren amparar ante la recién aprobada
ley lo pueden hacer porque es un derecho; sin embargo, afirmó que no
sólo es un asunto legal, “es un asunto moral, los deja muy mal parados.
Imagínense que estén defendiendo facturas falsas”.
Aseguró que con la falsificación de facturas y creación de empresas
fantasma el erario estaba dejando de recibir 400 mil millones de pesos
al año, lo cual era tolerado por las administraciones pasadas.
“Los factureros estaban protegidos, apoyados, y ahora lo estamos
constatando. Es como: ‘El rey va desnudo’, como diría el niño inocente.
Nadie lo veía, y en el desfile el niño señaló que el rey iba desnudo y
todo mundo empezó a notarlo. Así estamos ahora. ¿Cómo van a defender
eso? Es increíble”.
Afirmó que el combate contra empresas factureras busca “poner orden” y,
agregó, no es posible que sólo se aplique la ley al que no tiene
influencias, “al que no tiene agarraderas, al que no tiene con qué
comprarse su inocencia. ¿Y los delincuentes de cuello blanco?, que son
los peores, son los que dañan más, como los políticos corruptos.
Imagínense, no era delito grave la corrupción. Era para que estuvieran
ofreciendo disculpas todos los que apoyaron al régimen neoliberal”.
Dictador y despótico. Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex,
respondió con fuerza a las críticas del presidente Andrés Manuel López
Obrador sobre su postura frente a los cambios de la legislación que
castiga a las empresas factureras.
“Es absolutamente falso lo dicho por el presidente López Obrador en el
sentido de que la Coparmex apoya a las empresas factureras. Apoyamos el
esfuerzo del gobierno federal contra las empresas factureras, es una
competencia desleal y deben ser combatidas y erradicadas.
“Lo que decimos es que este propósito no puede tener como consecuencia
una vulneración de los derechos de seguridad jurídica y defensa de los
nuevos contribuyentes”, dijo De Hoyos.
Entrevistado después de reunirse con la dirigencia del Partido de la
Revolución Democrática (PRD), el empresario dijo que la Coparmex
mantendrá su crítica al gobierno en las medidas con las cuales no esté
de acuerdo el sector empresarial.
“Solamente un dictador, un gobernante despótico puede negarles a los
ciudadanos el derecho de legítima defensa conforme a las leyes. Nadie
puede señalar que hay un sabotaje legal y que se está excediendo cuando
se está ejerciendo un derecho jurídico establecido. Ni el señalamiento
de un presidente ni el de un funcionario van a amedrentar la acción de
la Coparmex”, añadió.
Dijo que con el PRD y otros partidos se analiza la posibilidad de
imponer un recurso de inconstitucionalidad, además de que puede acudir a
la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, con lo que también
ejercerá su derecho a ampararse, y rechazó el comentario del Presidente
sobre que el organismo empresarial tenga intereses partidistas.
“El presidente López Obrador señaló que veía en la Coparmex un partido
político. Yo quiero decirle al Presidente que no se confunda y que no
mienta. La Coparmex es una institución que tiene 90 años impulsando los
principios de la democracia laboral, impulsando la economía de mercado y
la responsabilidad empresarial. Hemos sido, somos y seremos
apartidistas”, dijo De Hoyos.
Indicó que el organismo mantendrá su postura crítica ante medidas de
cualquier orden de gobierno que puedan afectar la actividad de las
empresas, además de que rechazó cualquier intento de censura.
“Jamás vamos a renunciar a nuestro derecho ciudadano de estar
interesados en lo público. No aceptamos ni de él ni de nadie la censura.
Más allá de señalamientos, vamos a ejercer nuestro derecho a juzgar
cada una de las posturas del gobierno federal”, dijo.
Resaltó que es un despropósito que por perseguir a los delincuentes
fiscales se vulnere la tranquilidad de las empresas por un error,
omisión o interpretación inadecuada de la ley.
Por su parte, el líder nacional del PRD, Ángel Ávila, dijo que el
partido apoya la postura de la Coparmex, ya que la ley contra las
factureras tiene efectos reales contra las empresas.
“Hemos visto la posibilidad de interponer a través del partido político,
y de otros partidos en general, acciones de inconstitucionalidad
respecto de varios artículos que nos parecen muy graves en el tema de la
facturación. El PRD no acompañará esta equiparación casi de
delincuencia organizada o que se altere el tema de la ley de seguridad
nacional con el tema de las facturas. Ahí hemos reiterado nuestro
respaldo a la posición de la Coparmex”, dijo Ávila.
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