Debido a los excesivos gastos que genera este instituto, el cual debería mostrarse como una figura democrática, imparcial y reguladora en los procesos electorales, crear confianza y certeza en la ciudadanía, por el contrario, se ha desempeñado con poca eficiencia, eficacia e imparcialidad. Aunado a lo anterior, existiendo poca transparencia y múltiples irregularidades en este proceso electoral 2012, siendo parcial, indulgente y hasta complaciente, solicitamos la desaparición de dicho instituto.
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