De La Jornada
Astillero
Julio Hernández López
▲ La dirección de Notimex denunció una serie de ilegalidades durante la
votación que decidiría si continuaba la huelga y aseguró que los
responsables son “la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, con la
Junta Federal de Conciliación y Arbitraje y el Sindicato Único de
Trabajadores, quienes se aliaron.Foto Guillermo Sologuren
La postulación del académico y
activista John Ackerman para integrar un comité de evaluación de
aspirantes a consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) generó un
revuelo que de entrada es positivo en cuanto genera discusión y el
asomo ciudadano a los procesos de integración de un poder fundamental,
el electoral, que hasta ahora habían sido desahogados en batallas de
élites que se repartían cargos y decidían el futuro político del país de
una manera mafiosamente silenciosa, con muy buenas formas públicas
después de la rebatiña en privado.
Al doctor Ackerman se le reprocha su innegable (y frecuentemente
apasionada) adhesión al obradorismo ahora llegado a la Presidencia de la
República, su condición de esposo de una integrante del gabinete
andresino y su condición de extranjero de nacimiento, aunque ya sea
mexicano por naturalización. Salvo el punto de su pertenencia o no a un
órgano de dirección de Morena, en un consejo académico del Instituto
Nacional de Formación Política de ese partido, tema que será abordado
con más amplitud líneas más adelante, el doblemente doctor (en
sociología política y en derecho constitucional) reúne los requisitos
legales para participar en el comité antes mencionado.
En realidad, desde ayer mismo podría ser postulado no sólo para ese
puesto de breve temporalidad, de evaluación de aspirantes, sino incluso
para buscar un asiento como consejero electoral, pues este jueves la
Cámara de Diputados modificó la convocatoria del caso para incorporar lo
que ordenó el tribunal electoral federal: que se levante el veto para
mexicanos por naturalización y así estos puedan ser consejeros
electorales del INE e igualmente que termine la exclusión para miembros
del Servicio Profesional Electoral.
Aun cuando se ha levantado una oleada de críticas al Ackerman sólo
evaluador de una fase de un proceso del INE (¿cuánto sería el ruido si
aceptase lo que ha dicho que no aceptará, ser aspirante a consejero
electoral?), no está de más recordar que hasta ahora ese instituto ha
sido refugio y centro operativo de personajes impulsados abiertamente
por los partidos antaño dominantes. Hoy mismo, en la lista de los siete
evaluadores, entre los que va Ackerman, hay historiales relacionados con
poderíos ahora desplazados, sin que se generen tolvaneras mediáticas en
su contra.
La participación de Ackerman en ese comité de evaluación constituye
una representación vigilante de lo que suceda en un ámbito histórica y
aplastantemente regido por intereses políticos nefastos. La simulación,
el fraude electoral y el acompasamiento a órdenes de poderes fácticos
deben quedar atrás si ha de hacerse caso al mandato electoral de 2018
que definió los poderes presidencial y Legislativo y las consecuentes
decisiones jurídicamente legítimas que les corresponden, entre otras la
correspondiente a la sustitución escalonada de consejeros electorales
del INE.
En la postulación de Ackerman para el comité evaluativo hay un punto
que tal vez llegue al plano de la interpretación y decisión judiciales,
para definir si su participación en un comité académico de un instituto
de Morena, el de formación política, le inhiben para el cumplimiento del
encargo que le hizo la Comisión Nacional de los Derechos Humanos
(CNDH), presidida por Rosario Piedra Ibarra, quien a su vez ha recibido
similares objeciones, señalada por contar con un cargo directivo en
Morena antes de ser electa para dirigir de manera alternativa,
reivindicatoria a favor de los intereses reales de las víctimas, uno de
esos organismos creados por el salinismo, luego
autónomos, que han sido territorio abierto para el engaño y la manipulación a título de causas nobles, la
democraciaen el caso del INE, y los derechos humanos, en el caso de la CNDH.
Y mientras el Poder Judicial ha decidido mantener vigente la orden de
aprehensión contra Gastón Azcárraga, quien fue accionista mayoritario
de Mexicana de Aviación y principal responsable de la crisis y el fraude
en la quiebra de esa empresa, ¡hasta el próximo lunes!
Twitter: @julioastilleroFacebook: Julio Astillero
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