El futuro de MORENA
Jorge Salazar García
La relevancia que este partido, registrado en julio del 2014, desde que conquisto los primeros puestos de representación popular, vive un proceso de mimetización política adoptando los vicios de la partidocracia que desgobernó México. En nuestro Estado fue convertido en la monedita de oro que muchos ambicionan. Con el propósito de obtenerla, ingresaron muchos de los funcionarios que hoy disfrutan de las mieles del poder mientras otros perros de presa (PRI-PAN-VERDE, etc.) esperan ser llamados por quienes adulan sin medida. Hoy, gran parte de sus caudillos, dirigentes o funcionarios de partido, vuelven a meter las manos (nunca las han sacado), para ser ellos quienes “repartan” las próximas candidaturas, olvidándose por completo de aquel principio estatutario de no negociar con la mafia del poder; pero, sobre todo, haciendo a un lado a los miles de militantes idealistas que caminaron calles y tocaron puertas para convencer a otros sobre las bondades de su Partido.
Antes del registro de MORENA como partido, hubo voces advirtieron que el sistema de partidos estaba agotado y vivía una crisis irreversible de credibilidad. Una de esas voces fue la del subcomandante Marcos, quien dijo: “los partidos políticos sólo han servido para dividir a los pueblos y comunidades del país, además de que usan a “los de abajo” para llegar a posiciones y posteriormente, ya arriba, se olvidan de ellos”[1]. Al menos, en esta afirmación, el diagnóstico parece ser correcto. No es el único que ve de ese modo la descomposición de esos onerosos institutos de colocaciones y enriquecimiento “explicable”, son millones ya de incrédulos. Por esa razón las promesas de esos “elefantes blancos” resuenan más huecas que antes.
No obstante lo anterior, corresponde a los militantes de base otorgar el dictamen definitivo. Esa gente noble que aún teniendo en contra los funcionarios que traicionaron los Principios Estatutarios imponiendo peleles, moviendo títeres y creando tribus para conservar el control del Partido, continúa luchando para recuperar la vía de la congruencia ideológica, tiene la última palabra.
Por lo pronto, no son pocos los activistas que se organizan, intentando cambiar el modo pragmático de hacer política, dejando al margen las “líneas” de facciones. Sin duda es resultado del hartazgo por ser ignorados; su paciencia, de no obtener respuesta positivas de las dirigencias formales, se agotará mas temprano que tarde. Naturalmente, no será fácil, el cáncer avanzado está y hay mucho dinero invertido para hacer del Partido una agencia de colocaciones y una fuente de enriquecimiento personal. En Veracruz es lamentable el deterioro, los ideales de servir al pueblo, no mentir, robar ni traicionar fueron pisoteados, por ejemplo, aprobando la reelección y no revocación de mandato (Porfirismo puro).
A pesar de la descomposición, los triunfos volverán a darse en 2021, debido al cumplimiento de las promesas de AMLO. Principalmente al hacer constitucionales los apoyos sociales y combatir la corrupción. Hay un voto duro para MORENA, (adultos mayores, discapacitados, campesinos, jóvenes construyendo el futuro, etc. Eso lo saben tiros y troyanos; sin embargo, una vez disminuido el factor AMLO, la gente ya no creerá y volverá a vender el sufragio al mejor postor. La tarea pendiente, entonces, es convertir al partido en una organización de y para los ciudadanos. Los militantes ya no deben esperar recibir formación y capacitación política de quienes se roban el dinero destinado a ello, tiene que regresar a la comunidad, colonia y barrio donde anidan los saberes y soberanía popular.
Pareciera una tarea casi imposible, Incluso sonar utópico; pero no lo es; los Estatutos que norman su vida interna establecen (2º, 3º, 5º, 14º, 16º, 32º f, 38º f,…)[2] que esas deben ser las responsabilidades fundamentales del Partido. Los verdaderos protagonistas del partido debe recuperarlo con estudio, entrega y trabajo. Al hacerlo, podrían convertir al Partido en un verdadero instrumento al servicio de la gente que trabaja; pero si los pillos se quedaran con el Partido, no sería problema, ya que no sería necesario para exigir y fortalecer los cambios por los que la gente voto en 2018.
[1)Sánchez Gustavo: Ariategui Noticias. Mayo 5, 2015. http://aristeguinoticias.com/0505/mexico/nuestra-realidad-se-sintetiza-en-ayotzinapa-subcomandante-marcos-galeano/
[2] http://www.ine.mx/archivos3/portal/historico/recursos/IFE-v2/DS/DS-CG/DS-SesionesCG/CG-resoluciones/2014/Noviembre/CGex201411-05/CGex201411-5_rp_6_a1.pdf
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