Javier Milei, el loco*.

 

                                                    ¿Por qué votaron por él?    

Jorge Salazar García. 

Javier Milei, al ser un político que niega serlo, es un esquizofrénico. Incluso algunas de sus afirmaciones son contradictorias o irracionales. Mucho debieron influir las golpizas y humillaciones paternales en hacer de él un desquiciado; un niño raro, solitarios, huraño y violento según sus compañeros de escuela que lo rechazaban y aislaban. Le apodaron “el loco”. Sin duda, esa falta de amor explica su personalidad fúrica, grosera, explosiva y agresiva que lo posicionó mediáticamente entre la juventud decepcionada de los políticos y de los partidos. Resultó ser el payaso ideal para la derecha estridentista y las redes sociales amarillistas. Conforme más insultos y barrabasadas profería más viral se volvía, al grado de ser convertido en un líder libertario de opinión. Es un demagogo locuaz que afirma ser superior moral, ética y estéticamente a los políticos de izquierda. Esta superioridad, como demostrara Alfred Adler, esconde su complejo de inferioridad producto de su niñez llena de maltratos y rechazos. Su ex patrón en la Corporación América le calificó de empresario “fallado”. Es admirador de Israel, EUA, las dictaduras y del fascismo. Se auto define como anarco-capitalista o capitalista libertario. La psicología lo clasificaría como SOCIÓPATA.  

Habla con el espíritu de su perro, (Conan, muerto en 2017), a través de una médium que afirma contactar hasta con mosquitos. Afirma ver a su perro sentado junto al Señor, gracias a ello puede hablar con Dios. Así fue como se enteró de que tenía la misión de ser presidente. Uno de los 4 clones de Conan, le nombró “Milton”, en honor del padre del Neoliberalismo (Friedman). Llama sociópatas a los políticos por tratar a los gobernados como “inválidos mentales haciéndoles creer que sin ellos no se puede vivir”. Sostiene que si Argentina separara a la gente en productiva e improductiva, en esta última categoría estarían los políticos, los sindicalistas que son la mierda; unas ratas que no sirven para nada. Su estilo  oratorio es de un dramatismo saturado de odio cuando se refiere al Socialismo. Se muestra cínico cuando promete terminar con la “casta política” corrupta, siendo que el mismo fue acusado de vender diputaciones. Presume de antifeminista y anti ideología de género, igual que un misógino machista.

¿Qué propone?

Quiere eliminar los programas sociales, los considera “una inmundicia de lo más injusto que existe, porque implica robarle a una persona el fruto de su trabajo para dárselo a otra. Los únicos que progresan con la justicias social y la redistribución del ingresos son los políticos”, afirma. Propone liberar la venta de órganos y armas, privatizar todo lo público, eliminar el banco central y suprimir derechos laborales (jubilación, salarios, prestaciones). Juzga superiores a los empresarios, porque “no viven abogando por la envidia, el odio, el resentimiento, el robo, el trato desigual frente a la Ley, como los trabajadores. Lo dijo con absoluta claridad en su toma de posesión, habrá un ajuste ordenado que caerá con toda su fuerza sobre el Estado y no sobre el SECTOR PRIVADO. Sabemos que será duro (para el pueblo, claro) que les significará supremos sacrificios”. Como todo demagogo promete la luz al final del túnel, pero antes, a corto plazo las condiciones sociales empeorarán. Los señores capitalistas están felices, siempre roban, sus ganancias se multiplican en periodos de crisis económica e inclusive empezaron a re etiquetar los precios durante la campaña de Milei. Ya no habrá vedas para ellos.

¿Quiénes votaron por él

Fueron los jóvenes quienes decidieron que  un LOCO los gobernara los próximos 4 años. Jóvenes de las generaciones X, Y, Z, adoctrinados por esa educación por “competencias” diseñada e impuesta con golpes de Estado militares y blandos por Washington. Con aquella se despoja a la gente del sentido de pertenencia, de clase, cultural y comunitario. En las aulas y los medios, sin cesar les moldean una personalidad, individualista y egoísta. Aprenden a expresar más amor a las MASCOTAS que a las personas, porque son más “fieles” que los humanos. Posicionan ** en su cerebro el banal estilo de vida gringo, donde la estupidez, la superficialidad, el consumismo, el individualismo, la grosería y la ley del más fuerte sustituyen los valores de respeto y convivencia social. Leen, ven y escuchan sin cesar que el único modo de ser felices es siendo millonarios, por ello hay que enriquecerse  lo más pronto posible, sin miramientos de ninguna clase. La solidaridad es una pavada, (Milei, dixit). Detenerse por escrúpulos morales es estúpido y entorpecen el éxito. Consecuentemente, robar, asaltar, vender droga, matar por encargo, engañar, traficar armas, defraudar, mentir no es inmoral o, si lo es, nadie lo reprochará si se tiene dinero en abundancia.

¿Por qué votaron por Milei?

El voto útil provino de los decepcionados del sistema. Pertenecen a las clases medias humilladas, empobrecidas y engañadas por los políticos de toda laya. Su frustración y rabia, al ver el enriquecimiento impune de quienes les prometieron una vida mejor, les motivó el deseo de VENGANZARSE de quién creen los ultrajó. No importa quién se las hizo (causa original) sino que alguien se las paga. En estas condiciones de vulnerabilidad emocional apareció un “salvador” (se dice ser acompañado por las fuerzas del cielo) capaz de infringir sufrimiento al verdugo inmediato. De ahí que hayan votado por un descerebrado vengativo de su miserable vida infantil. Milei expresa exactamente lo que ellos sienten de los políticos. Al menos, con él, cuando golpeé el trasero de algún chivo expiatorio convenido tendrán un desquite. Visto lo anterior, se comprende que esos argentinos, hayan elegido a Milei irreflexivamente. Su respuesta fue condicionada con anterioridad, bastó activar el estímulo durante las campañas electorales. Indudablemente algunos esperan convertirse en príncipes con el (selfi o saludo del rufián en turno) beso del candidato que les prometió expulsar a los políticos que “no sirven ni de mierda” enriquecidos morbosamente en el gobierno.

¿Cumplirá Milei?

No podrá cumplir sus promesas, pues no ganó la mayoría del Congreso. Tal vez logre dolarizar la economía, privatizar bienes públicos y el banco central. Se le dificultará disminuir derechos laborales y desaparecer programas sociales sin el concurso de la oposición y las trasnacionales. Iniciará lo que ya se hizo en México, la reforma estructural del Estado para hacer irreversibles los privilegios de los poderosos. Negociará con la mierda (sus iguales), de otro modo, ¿Quién mantendría al tigre dormido? Saben que despierto no distinguiría la sangre azul de la roja. Ese tigre que despertó, por ejemplo, en Chiapas en 1994 y hoy rugió en Texcaltitlán, Estado de México.

Esto me recuerda la siguiente escena de la película Tizoc: En una cueva, uno de sus enemigos pide al tecolote que cante para que el indio muera. El hechicero consultado les advierte que ahí todos son indios y cualquiera de ellos podría morir. Azorados, los indios deciden que es mejor que no cante el tecolote. Igual Milei, no deseará la muerte de lo “políticos” pues él mismo es uno de ellos.

Conclusiones

Argentina es el laboratorio del “Nuevo Orden Mundial”, (neocolonialismo), en el cual se espera que el sujeto de experimento acepte sumisamente sus cadenas glorificando a sus verdugos. El neoliberalismo se afianza con toda su cauda de destrucción y muerte. 

Desolador panorama para las dignas resistencia pues, como ya sucede, los rebeldes sociales son anatemizados como terroristas, parásitos, obstáculos del desarrollo, de la justicia, la libertad y la democracia. Para los ninis y jóvenes con síndrome de emperador, aquellos que resiste son seres improductivos (parásitos) que merece ser encarcelados, torturados, exterminados, o todo junto. Sus héroes son los idiotas, superficiales, de mente cosificada, como Milei.

México 2024.

Muchos piensan que el triunfo de Claudia está asegurado. Si tal escenario tiene la aprobación yanqui, entonces así será. Aunque la 4T ha fallado en los aspectos de corrupción, justicia laboral, campo, seguridad y la pobreza disminuyó, la estabilidad de las variables macroeconómicas se mantiene. Lo anterior aunado al incremento de infraestructura tiene felices a las trasnacionales y a los grandes empresarios. Hay enojo en las clases medias cautivas que pagan impuestos y son extorsionadas de mil maneras. Aun así, la derecha no ganará la presidencia. Sin un MILEI eso jóvenes de derecha sólo ganarán la mayoría del Congreso. Próximo artículo: “Milei y el Socialismo”.

*”El Loco”, título del libro de Juan Luis González, 2023. 

**Posicionar: lograr que un producto quede fijado en la mente del consumidor.