De La Jornada
Astillero
Morena en su laberinto
Procesalmente, bien
Quejas y denuncias
RL, en breve
Procesalmente, bien
Quejas y denuncias
RL, en breve
Julio Hernández López
En términos numéricos y
procesales le ha ido bien a Andrés Manuel López Obrador en la fase de
realización de asambleas y nombramientos de directivos para constituir
un nuevo partido. Dada la base social del tabasqueño, el número de votos
que recibió en la pasada elección presidencial, el tiempo que lleva en
constante movilización y el desgaste de su principal contrapunto, el
Partido de la Revolución Democrática, lo extraordinario hubiera sido que
el Movimiento Regeneración Nacional hubiera tenido problemas formales
para acreditar el número de ciudadanos interesados en su conversión
partidista o para lograr la aprobación de sus propuestas básicas.
Sin embargo, este proceso ha sido particularmente ríspido, y no
solamente porque de manera natural los adversarios de ese líder y ese
movimiento se obstinen en colocar trampas y obstáculos. Planteado
originalmente como mecanismo de consulta para saber si las bases de
Morena deseaban seguir como movimiento o preferían convertirse en
partido político, rápidamente fue dominado por la decisión, claramente
tomada desde la cúpula, de impulsar la segunda opción. Luego se ha
vivido un constante desajuste entre las buenas intenciones que AMLO ha
difundido en sus discursos, buscando la creación no sólo de un partido
diferente, sino de una cultura política distinta, sin los vicios que han
formado tradición en la realidad nacional, y la práctica concreta de
los grupos que han tratado de controlar la selección de los delegados y
la designación de directivas estatales y que para ello, según diversos
reportes, han desplazado a sus contrincantes internos con métodos que
parecieran repetir la experiencia de tribus y tretas del PRD y que no permiten vislumbrar el destierro de los vicios partidistas tradicionales.
Esas quejas y señalamientos han recibido una constante
descalificación de quien se encamina a ser el dirigente nacional de esa
nueva organización, el mencionado López Obrador, quien atribuye las
inconformidades a maniobras de adversarios mayores o de despechados
menores. Sin embargo, entre quienes denuncian errores y desviaciones, y
muestran desesperanza fundada ante lo que podría ser el futuro del
Partido de la Regeneración Nacional (Pegenal), hay seguidores
apasionados de las luchas libradas con AMLO al frente, deseosos de un
nuevo camino pero temerosos de que la construcción de un nuevo partido
termine en una recurrencia masoquista a los mismos procesos electorales
que le han tumbado al tabasqueño dos veces la Presidencia de la
República y que solamente han servido para consolidar una práctica
política de cúpulas partidistas eternizadas en la falsa representación
popular.
Aún peor: ya constituido como partido político, Morena podría terminar convergiendo en tristes espectáculos de
unidadizquierdista a toda costa con los partidos a los que tanto repelió y que lo llevaron por ello a construir el propio. Es decir, y a pesar de que muchos de quienes están participando de buena voluntad en el proceso de movimiento (Morena) a partido (PRN) creen que se están desembarazando de un modelo perredista firmemente repudiado, a la hora de la verdad podrían ver a la nueva criatura repitiendo historias de negociaciones, reparto de candidaturas, frentes y otros mecanismos tan conocidos en el pasado oscuro de la izquierda electoral, sólo que ahora con Morena ya no como un movimiento tolerado, sino como un cuarto partícipe de subsiguientes alianzas con el sol azteca, el PT y el Movimiento Ciudadano. Dar vueltas y vueltas para acabar casi en lo mismo.
MISS FERROCARRILERA. Tres de las participantes en el cuarto concurso
de Mister y Miss Ferrocarrileros, que se llevó a cabo en el teatro del
mismo nombre, organizado por el sindicato de este gremio, con la
presencia de su líder sindical, Víctor FloresFoto Marco Peláez
Andrés Manuel López Obrador es hasta hoy el único dirigente
político capaz de organizar una resistencia popular ante los esperados
embates del priísmo dinosáurico llegado al poder con ánimos de
revanchismo concentrado. Por el bien de lo que queda de la izquierda
mexicana y por la necesidad de sostener un movimiento social que vaya
más allá de lo electoral, bien haría el tabasqueño si revisara con ánimo
frío el proceso llevado hasta ahora en Morena, si se asumiera más como
el líder social en lucha que México necesita que como el próximo
dirigente de un partido más del sistema hasta ahora conocido y si
evitara repetir procesos de candidaturas, campañas y desenlaces
electorales que, a nivel nacional, en varias gubernaturas y en muchos
municipios y congresos locales demuestran que continuar con las mismas
fórmulas llevará a los mismos resultados.
Astillas
Asegura el augur legislativo Manlio Fabio Beltrones que
en breveserá aprobada la polémica propuesta de reformas en materia laboral que antes había dicho que pasaría por un largo proceso, entre otras razones porque había perdido el caracter de iniciativa preferente con el que Felipe Calderón la había enviado. Luego del cambio de giro que ordenó Enrique Peña Nieto, el diputado sonorense, quien había asegurado que Felipe Calderón vería la luz verde a esa reforma desde una silla que no sería la presidencial, dice que el voto de la bancada de tres colores en San Lázaro será
consistente. A la luz de los zigzagueos, retrocesos y enredos que se han vivido en este asunto, tal vez lo único
consistentesea esperar a ver qué nuevas inconsistencias aparecen.
Aun cuando las consecuencias prácticas poca diferencia muestran entre
un gobierno republicano y uno demócrata, las elecciones presidenciales
estadunidenses hacen a algunos observadores albergar esperanzas de que
Barack Obama pudiera en un segundo periodo dar cumplimiento a sus
promesas de cuatro años atrás respecto a reformas migratorias benéficas
para parte de los mexicanos que viven en el país del norte. Sabido es
que el peso migratorio de los paisanos aún no tiene traducción concreta
en las estructuras de poder de Estados Unidos, pero aun así es ya un
objetivo natural a mediano plazo de los políticos pragmáticos de uno u
otro de los partidos que juegan a la democracia desde Washington.
Y, mientras se han cumplido cuatro años de la muerte de Juan Camilo Mouriño, ¡hasta mañana!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario